Con motivo de la Exposición Universal de 1929 y para facilitar una vivienda digna a muchas de las familias que llegaron a Barcelona desde otras partes de España, se construyeron cuatro grandes polígonos de casitas bajas. Uno de ellos fvue el que se construyo al pie del turó de la Peira y al que se le puso el nombre de Ramón Albó, conocido también popularmente como las casas baratas de Horta. Otros nombres que tuvo también fueron: grupo de casas baratas Giner de los Ríos, durante la Guerra Civil y actualmente se le conoce como de Can Paguera. En este barrio, el 28 de febrero de 1932, el alcalde de Barcelona doctor Aiguader inauguró el grupo escolar Giner de los Ríos.
Como datos complementarios y para facilitar la información, decir que inicialmente las calles de este barrio fueron conocidas por números hasta el año 1945, cuando estos fueron cambiados por los nombres de diferentes pueblos de las comarcas de Girona.
Durante la Guerra Civil y ante la amenaza de los bombardeos que sufrió Barcelona, los vecinos de las casas baratas de Horta se organizaron para construir un refugio antiaéreo, excavado en la montaña, debajo del turó de la Peira, bajo el epígrafe: Refugio 647 calle 19 (casas baratas de Horta - Turó de la Peira) (subvencionado).
Para facilitar el acceso de los vecinos al refugio, la obra fue planificada con cuatro entradas de galería de mina de una longitud variable, repartidas a lo largo de la calle número 19 –Cornudella– y que habían de confluir en otra galería paralela a la calle que las enlazaría en su interior.
Como datos complementarios y para facilitar la información, decir que inicialmente las calles de este barrio fueron conocidas por números hasta el año 1945, cuando estos fueron cambiados por los nombres de diferentes pueblos de las comarcas de Girona.
Durante la Guerra Civil y ante la amenaza de los bombardeos que sufrió Barcelona, los vecinos de las casas baratas de Horta se organizaron para construir un refugio antiaéreo, excavado en la montaña, debajo del turó de la Peira, bajo el epígrafe: Refugio 647 calle 19 (casas baratas de Horta - Turó de la Peira) (subvencionado).
Para facilitar el acceso de los vecinos al refugio, la obra fue planificada con cuatro entradas de galería de mina de una longitud variable, repartidas a lo largo de la calle número 19 –Cornudella– y que habían de confluir en otra galería paralela a la calle que las enlazaría en su interior.
Las entradas al refugio se abrieron en la pared que limitaba el barrio por el lado de la montaña, organizándose de tal forma que cada una tuviera delante una calle, y así se abrieron delante de las calles 10 –Darnius–, 30 –Pins–, 34 –Fitor–, la cuarta se construyo también en la pared pero cerca de la escuela. Según documentos de la época, esta tenía un doble acceso, uno de ellos muy cerca de la escuela. Esta entrada según documentación de la época también tenia un pozo de ventilación.
Según un informe del Ayuntamiento de Barcelona de principio de los años cuarenta, el refugio de casas baratas de Horta estaba en estas condiciones: Cinco bocas tapiadas, de ellas dos revestidas; Longitud de mina 198 ml revestida 111,90 m; 2,00 X 2,00; Protección superior 8,00 m; Capacidad 396 m2; Y añadía las acciones que se habían de hacer; Derribo paredes de cierre 5; Revestido bocas 3; Revestir mina 86,10 m; Galería nueva 156 m.
De lo que se desprende de este informe se puede interpretar que de las cinco entradas que estaban abiertas, sólo dos estaban construidas con ladrillos; que falta completar parte de la galería de mina, por lo que se ha podido ver en la visita al refugio del 21 de enero de 2012, la galería que debía enlazar las galerías de entrada sólo estaba iniciada o brevemente apuntada al final de cada galería.
Según este documento también se puede entrever que todas las entradas fueron cerradas, o sea tapiadas por el Ayuntamiento al final de la guerra, pero de lo que se desprende de las conversaciones con algunos vecinos, al parece estas en un momento dado fueron derribadas y se convirtieron en vivienda de alguna familia y también como un espacio de juego para los niños.
Con respecto a la mencionada visita en la que sólo se pudo acceder a dos de las entradas, las que hay delante de las calles Fitor y Pins. La primera la entrada y la galería están en muy buenas condiciones, de los restos que hay en sus paredes los más importantes son los que hacen referencia a la iluminación de esta galería con tacos de madera anclados en las paredes y el techo. En relación a la segunda galería visitada la obra no estaba tan avanzada al acabar la guerra, cosa que contribuyo con el paso de los años, que se produjeran pequeños hundimientos en la galería, en los espacios donde no estaba cubierta con ladrillos. En cuanto a la iluminación no se han encontrado tacos de madera en paredes, pero si un aplique de lo que podría ser la iluminación de emergencia y una abertura en uno de los laterales de esta galería perfectamente construido, como si allí se hubiera querido construir algún tipo de servicio, enfermería o aseos.
Según un informe del Ayuntamiento de Barcelona de principio de los años cuarenta, el refugio de casas baratas de Horta estaba en estas condiciones: Cinco bocas tapiadas, de ellas dos revestidas; Longitud de mina 198 ml revestida 111,90 m; 2,00 X 2,00; Protección superior 8,00 m; Capacidad 396 m2; Y añadía las acciones que se habían de hacer; Derribo paredes de cierre 5; Revestido bocas 3; Revestir mina 86,10 m; Galería nueva 156 m.
De lo que se desprende de este informe se puede interpretar que de las cinco entradas que estaban abiertas, sólo dos estaban construidas con ladrillos; que falta completar parte de la galería de mina, por lo que se ha podido ver en la visita al refugio del 21 de enero de 2012, la galería que debía enlazar las galerías de entrada sólo estaba iniciada o brevemente apuntada al final de cada galería.
Según este documento también se puede entrever que todas las entradas fueron cerradas, o sea tapiadas por el Ayuntamiento al final de la guerra, pero de lo que se desprende de las conversaciones con algunos vecinos, al parece estas en un momento dado fueron derribadas y se convirtieron en vivienda de alguna familia y también como un espacio de juego para los niños.
Con respecto a la mencionada visita en la que sólo se pudo acceder a dos de las entradas, las que hay delante de las calles Fitor y Pins. La primera la entrada y la galería están en muy buenas condiciones, de los restos que hay en sus paredes los más importantes son los que hacen referencia a la iluminación de esta galería con tacos de madera anclados en las paredes y el techo. En relación a la segunda galería visitada la obra no estaba tan avanzada al acabar la guerra, cosa que contribuyo con el paso de los años, que se produjeran pequeños hundimientos en la galería, en los espacios donde no estaba cubierta con ladrillos. En cuanto a la iluminación no se han encontrado tacos de madera en paredes, pero si un aplique de lo que podría ser la iluminación de emergencia y una abertura en uno de los laterales de esta galería perfectamente construido, como si allí se hubiera querido construir algún tipo de servicio, enfermería o aseos.
Galería de entrada enfrente de la calle Fitor
Galería de entrada enfrente de la calle Pins
Las fotos y gran parte de la información recogida dentro del refugio ha sido posible gracias a los esfuerzos de Josep Maria Clariana de la asociación de vecinos, el Xavi y la Carmen, así como de los amigos de l’Arxiu Històric de Roquetes – Nou Barris, entre otros que han aportado su pequeño grano de arena para que todo esto posible.
Fotos y texto Josep Maria Contel
Gràcies per aquesta feina tan ben feta i aquest compromís, sóc del barri del Carmel i desconeixia totalment el refugi de les cases barates d'Horta.
ResponEliminaAgrairé qualsevol informació sobre si es pot fer alguna visita en grup.
Una forta abraçada
Ruben Sanchez ( Grup Caliu )
http://documentaldiferents.blogpspot.com